Ubicado en Avenida Independencia al 2400 – esquina Matheu- en el barrio de San Cristóbal, el Bar de Cao fue fundado alrededor del año 1915 y diez años después es adquirido por los hermanos asturianos Pepe y Vicente Cao y toma – en un principio- el nombre “La Armonía” y funcionaba, también, como almacén y despacho de bebidas. De esta manera, Pepe manejaba el bar y su hermano Vicente se hacía cargo del almacén.
Este lugar formó parte de un triunvirato emblemático: Miramar – Bar de Cao – Bar de Carlitos, los tres puntos de encuentro preferidos por los habitantes de la zona y por donde pasaron sus ciudadanos ilustres: Luis Sandrini, Enrique Muiño, Oscar Gálvez, Donofri Marimón, y María la Vasca.
Durante el gobierno de Perón y mediante una nueva reglamentación, el bar queda “dividido” en dos partes; por un lado, queda el almacén – con entrada sobre la Avenida Independencia, y por el otro lado queda instalado el bar – teniendo su respectiva entrada sobre la calle Matheu-. En el año 1999 Vicente falleció y su hermano Pepe quedó a cargo del lugar, y lo mantiene así, hasta el año 2000 que el bar cierra.
Luego lo reabre un vecino, fotógrafo, pero su ilusión, lamentablemente, no prospera – recordemos que en ese entonces el país se encontraba inmerso en una gran crisis tanto económica como social- es entonces, nuevamente, adquirido por el músico Jorge Muhary quien es el encargado de darle el nombre de “Bar Cao” en homenaje a sus antiguos dueños asturianos, pero nuevamente el negocio no prospera. No es hasta el 2005 que es nuevamente inaugurado por el grupo gastronómico a cargo de Pablo Duràn.
El bar cuenta con una estética cuyo propósito es mantener intacto su ímpetu, su esencia. Dentro del bar podemos observar una barra larga y robusta hecha en mármol y madera y detrás de la misma estantes con muchísimas botellas “de época”, además de contar con sus pisos originales hechos de mosaicos graníticos. Una de las cosas más pintorescas, además, es la cantidad de ventanitas individuales que corresponden a la ubicación de cada mesa. Y cuenta, además, con objetos de colección los cuales son: una caja registradora, una balanza y una antigua máquina de café.
El Bar de Cao se especializa en cervezas artesanales tiradas y unas picadas espectaculares. Es el bar de Cao un lugar que sin duda vale la pena conocer.
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