Según el Observatorio de las Violencias de Género en todo el año 2021 se contabilizaron 256 femicidios, mientras que en el primer mes del nuevo año, ya se registran 28.
Según lo relevado a partir del análisis de medios de comunicación gráficos y digitales de todo el país, el primer mes de 2022 ya se cuentan 28 femicidios: 1 cada 27 horas. En enero se registraron casi la misma cantidad de femicidios que de intentos: 22. Los intentos son parte de un proceso de violencia que por distintas circunstancias no llegaron a la muerte, pero en los que el Estado debe hacer foco, y asumir la responsabilidad que le compete, de proteger a esas mujeres..
El femicida está en el círculo de conocidos.
Si bien el 54% de los femicidios es cometido por parejas y ex parejas de la víctima, es importante subrayar que el 11,3% es cometido por un familiar y el 9,8% por un conocido, lo cual nos arroja que el 75% de los femicidios son llevados a cabo por alguien del círculo íntimo de la víctima. En enero de 2022, al igual que durante todo el 2021, el 60% de los hechos, ocurrieron en la vivienda de la víctima, que en muchos casos comparte con el agresor. Sin perder de vista que el 28,6% de los femicidios concretados en enero tuvieron lugar en la vía pública, lo cual es una evidencia de la impunidad con la que actúan los agresores, quienes se sienten avalados para ejercer violencia a la vista de todxs. En este sentido, el compromiso debe ser de todxs, desde el Estado, y de la sociedad en general.
La forma en que se comete el femicidio reveló que en enero en el 46,4% de los casos se utilizó un arma blanca. Mientras que el 21,4% fue perpetrado con armas de fuego. Se entiende que las armas blancas son de fácil y cotidiano acceso, pero en el caso de las armas de fuego es necesario controlara su posesión, especialmente si el agresor pertenece a las fuerzas de seguridad. En este registro 1 de los casos observa a un policía como el agresor, por lo cuál restringir la tenencia de armas de fuego, es fundamental en caso de que personas pertenecientes a las fuerzas de seguridad, tengan denuncias por violencia machista. En este marco es urgente la formación en perspectiva de género y derechos humanos de las fuerzas de seguridad, no sólo para romper con las complicidades con los agresores que pertenecen a la institución, sino también para no desproteger a todas las mujeres. Tener fuerzas de seguridad con prácticas basadas en derechos humanos es una deuda de la democracia con nosotrxs.
En lo que va del año el 14% de las víctimas había realizado al menos una denuncia y sólo el 7% tenía una medida de protección judicial. Denunciar en situaciones de violencia es difícil por la complejidad del contexto, muchas veces se siente vergüenza y desconfianza, por esto es que es fundamental una reforma dentro de la Justicia. Si sólo la mitad de las mujeres que denunciaron tuvieron una respuesta judicial que además no fue controlada por la policía y terminó en muerte, es por falta de formación, compromiso y presupuesto. Urge que todas las instituciones transformen sus prácticas machistas, para esto se requiere una reforma judicial transfeminista, que tome decisiones con mirada interseccional inclusivas.
Entendemos que la violencia machista y su punto más extremo, los femicidios, forman parte de un entramado cultural y social sostenido hace miles de años por la desigualdad entre mujeres, diversidades sexuales y varones.
Erradicar las violencias y desigualdades debe ser un compromiso y un interés de todxs.
Datos destacados:
– 1 femicidio cada 27 horas en enero
– 22 intentos de femicidio en enero
– El 54% de los femicidios fue cometido por las parejas y ex parejas de las víctimas
– El 60% de los femicidios ocurrió en la vivienda de la víctima
– En 1 caso el femicida pertenece a la Policía.
– El 14% de las víctimas había realizado al menos una denuncia y el 7% tenía medidas de protección
– Al menos 22 niñxs perdieron a sus madres como consecuencia de la violencia machista en 2022